Estaré encantada de acompañarte en tu proceso de cambio y de ayudarte a alcanzar tus objetivos.
Cuando una persona, pareja o familia acude a mi consulta, lo hace porque hay alguna situación que le genera malestar, dolor o insatisfacción y considera que necesita ayuda para resolverla.
La primera fase de la intervención terapéutica es fundamental. En ella se forjan los cimientos de la relación terapéutica, variable que influirá en el éxito de la terapia y la consecución de sus objetivos. Se trata de esa relación de confianza y seguridad, en la que deberás sentirte cómodo conmigo, comprendido, respetado y sentir que soy la persona adecuada para ayudarte en tu proceso de cambio.
En la evaluación de tu situación problema y partiendo de los objetivos que quieras y necesites trabajar para sentirte mejor, analizaremos tu motivación hacia el cambio, el área de afectación del problema (personal, familiar, laboral, social), la sintomatología asociada (emocional, conductual, cognitiva, relacional), las estrategias de solución que hayas puesto en marcha hasta ese momento y los recursos y capacidades con las que cuentas. Partiendo de un análisis del problema centrado en presente, en “el aquí y el ahora”, diseñaremos la intervención hacia el futuro, definiendo los objetivos hacia los que dirigir tu trabajo terapéutico.
Desde un enfoque de terapia breve, la intervención garantizará el menor número de sesiones posibles. Habitualmente, se mantiene una sesión semanal, de una hora aproximada de duración. El desarrollo de la terapia se centrará en la adquisición de recursos, técnicas, estrategias y habilidades, fomentando los cambios necesarios que aseguren la consecución de los objetivos.
La primera fase de la intervención terapéutica es fundamental. En ella se forjan los cimientos de la relación terapéutica, variable que influirá en el éxito de la terapia y la consecución de sus objetivos. Se trata de esa relación de confianza y seguridad, en la que deberás sentirte cómodo conmigo, comprendido, respetado y sentir que soy la persona adecuada para ayudarte en tu proceso de cambio.
En la evaluación de tu situación problema y partiendo de los objetivos que quieras y necesites trabajar para sentirte mejor, analizaremos tu motivación hacia el cambio, el área de afectación del problema (personal, familiar, laboral, social), la sintomatología asociada (emocional, conductual, cognitiva, relacional), las estrategias de solución que hayas puesto en marcha hasta ese momento y los recursos y capacidades con las que cuentas. Partiendo de un análisis del problema centrado en presente, en “el aquí y el ahora”, diseñaremos la intervención hacia el futuro, definiendo los objetivos hacia los que dirigir tu trabajo terapéutico.
Desde un enfoque de terapia breve, la intervención garantizará el menor número de sesiones posibles. Habitualmente, se mantiene una sesión semanal, de una hora aproximada de duración. El desarrollo de la terapia se centrará en la adquisición de recursos, técnicas, estrategias y habilidades, fomentando los cambios necesarios que aseguren la consecución de los objetivos.

Intervenciones
Terapia individual adulto
- Ansiedad, estrés, control de impulsos.
- Depresión, bajo estado de ánimo, insatisfacción general.
- Pérdida de autoestima, inseguridad y falta de confianza en uno mismo.
- Trastornos psicosomáticos.
- Trastornos del sueño.
- Dificultades en las relaciones interpersonales en un entorno familiar, social y/o laboral.
- Dependencia emocional.
- Proceso de duelo (fallecimiento, rupturas de relación sentimental, pérdida de relación afectiva).
- Problemas de adaptación.
- Adicciones, consumos.
- Dificultades en las relaciones sociales.
- Apoyo en la infertilidad.

Intervenciones
Terapia infanto juvenil
- Evaluación y tratamiento sobre problemas emocionales, conductuales y /o académicos.
- Ansiedad, estrés, autocontrol.
- Depresión Infantil, bajo estado de ánimo, duelo.
- Miedos, fobias.
- Terrores nocturnos, pesadillas, otras alteraciones del sueño.
- Problemas en la conducta de alimentación.
- Adicciones, consumo de sustancias, abuso de nuevas tecnologías.
- Dificultades de socialización y en las relaciones interpersonales.
- Baja autoestima.
- Falta de habilidades sociales.
- Conflictos familiares.
- Dificultades en las capacidades cognitivas (atención, memoria, concentración).
- Dificultades de aprendizaje, fracaso escolar.

Intervenciones
Terapia familiar y de pareja
- Conflictos entre la pareja: celos, infidelidad, problemas sexuales, dificultad para llegar a acuerdos, discrepancia educativa.
- Proceso de separación o divorcio.
- Conflictos con los hijos: establecimiento de normas y límites, manejo de rabietas y conducta desobediente, agresividad.
- Conflictos con otros miembros de la familia: padres, hermanos, familia política.
- Problemas de comunicación, falta de expresión de emociones.

